Si os gusta el queso no podéis dejar de probar esta tarta cremosa de queso ¡Os encantará su suave interior!

Supongo que en temas culinarios cada uno tiene sus propias debilidades. Yo tengo varias, pero entre las destacadas está el queso. Me gusta cualquier variedad: fuerte, suave, curado, cremoso… y puedo combinarlo con cualquier ingrediente (uvas, higos, galletitas, mermeladas…) o saborearlo solo. Sí, reconozco que el queso es mi pasión.
Por eso fue descubrir la tarta de queso de Clara Villalón (o Clara Masterchef) y sentir desde entonces un deseo irrefrenable de probarla. Advertencia para navegantes: es una tarta para muy queseros, pues su sabor es fuerte y la base de galletas saladas hace dudar de que se trate más de un postre, pues más bien parece un primer plato.

Clara dice que esta tarta está hecha con quesos de Invierno, pero como yo no distingo entre quesos de invierno y de verano (la razón es porque no descarto ninguno) decidí no cambiar las variedades que usó ella y lo cierto es que el resultado es francamente espectacular, una tabla de quesos hecha tarta.

Receta de tarta de queso cremosa
Ingredientes:
- 6 huevos
- 190 g de azúcar
- 70 g de queso azul de hojas
- 550 g de queso crema (tipo Philadelphia)
- 40 g de queso parmesano rallado
- 380 ml de nata líquida (para cocinar)
- 180 g de galletitas saladas
- ½ cucharada de azúcar
- 100 g de mantequilla
Preparación:
Empezamos triturando las galletas con un robot de cocina y mezclándolas con la mantequilla derretida hasta conseguir una pasta manejable. Forramos un molde de cremallera con papel de hornear y repartimos por encima la masa, apretando bien. La llevamos al congelador como mínimo 30 minutos.
Calentamos el horno a 200ºC y mientras preparamos el relleno. Para ello, batimos los huevos con el azúcar, los quesos y la nata hasta que no quede ningún tipo de grumo. Podemos usar la batidora de mano (túrmix) y de este modo será más fácil que no queden grumos.
Vertemos esta mezcla sobre la base de galletas y horneamos durante 15 minutos. Pasado este tiempo, bajamos la temperatura del horno a 180ºC y horneamos unos 12 minutos más.

Consejos para que la tarta salga de nota:
Lo más complicado de esta tarta es hornearla. Nuestro objetivo es conseguir un interior cremoso, como si se tratara de un coulant de chocolate y eso dependerá de nuestro horno y de si lo tenemos dominado (ya me entendéis).
Mi consejo es que sigáis las indicaciones de la receta, teniendo en cuenta que la superficie tiene que dorarse y el interior tiene que quedar medio crudo, pero no tanto que la tarta se deshaga al sacarla del molde. Lo mejor es jugar con las alturas del horno, taparlo si veis que se está haciendo demasiado (con papel de horno, por ejemplo) y que toquéis su superficie para comprobar que cede si presionáis ligeramente. Tiene que «temblar» en el centro.
Recordad que el resultado será más salado que dulce, por lo que podéis cambiar las galletas y en lugar de utilizar galletitas saladas cambiarlas por unas tipo Digestive. Quedará delicioso y nadie podrá discutiros que es un postre.

No te pierdas mis otras de tarta de queso:
Cuando os he dicho que soy fan del queso y que me pirran las tartas que llevan este ingrediente no era broma, y para demostrároslo, a continuación os dejo otras tartas de queso que he publicado en Dit i Fet y que también os recomiendo. ¡Viva el queso!
- Flaó o tarta ibicenca de queso
- Tarta de queso de La Viña
- New York Cheesecake o Tarta americana de queso
- Tarta clásica de queso
- Pastel veraniego de queso y cerezas
- Tarta de queso con semillas de amapola
- Brownie de chocolate con remolinos de crema de queso
- Tarta de menta, limón y tres quesos con confitura de higos
- Tarta helada de queso y limón
- Tarta salada de bimi y queso Gorgonzola


Si te decides a preparar mi propuesta te encantará su sabor, pero, eso sí, ligera lo que se dice ligera no es, por lo que si os interesa una receta de tarta de queso baja en grasa os propongo la tarta de queso fitnes de mi amiga Celeste ¡muy sencilla de preparar!
Soberanamente interesante este post referido a recetas